ISSN 2709-9164
https://doi.org/10.53940/reys.v1i2.57 Vol. 1(2) 2020
Guía para el autor de estudios de caso:
cómo investigar, escribir, enseñar y
evaluar
Case study author's guide:
how to research, write, teach and evaluate
Francisco Arias 1 y Orlando Betancur2
Citar
como: Arias, F. y Betancur, O. (2020). Guía para el autor de estudios de caso: cómo
investigar, escribir, enseñar y evaluar. Revista
Educación y Sociedad, 01(02), 31-43. doi: 10.53940/reys.v1i2.57
Artículo recibido: 12-11-2020
Artículo aprobado: 20-12-2020
Arbitrado por pares
La metodología de estudio de caso se constituye como
una alternativa pedagógica para la investigación y la enseñanza en el campo
empresarial. Este trabajo propone una ruta para investigar, escribir, enseñar y
evaluar estudios de caso en programas académicos de corte empresarial. Se
realiza una aproximación mediante la técnica de análisis documental y el uso de
matrices categoriales para sintetizar las pautas metodológicas. Como resultado,
se tiene una compilación de los principales aportes que se tienen en el proceso
de implementación de estudios de caso.
Palabras
clave: caso, estudio, empresa, investigación, evaluación
The
case study methodology is constituted as a pedagogical alternative for research
and teaching in the business field. This paper proposes a route to research,
write, teach and evaluate case studies in entrepreneurial academic programs. An
approach is made through the technique of documentary analysis and the use of
categorical matrices to synthesize the methodological guidelines. As a result,
we have a compilation of the main contributions to the process of implementing
case studies.
Key words:
case, study, company, research, evaluation
1
Corporación Universitaria Americana. fjarias@americana.edu.co
https://orcid.org/0000-0002-4483-1741
2 Institución
Universitaria Digital de Antioquia. coordadministracion@iudigital.edu.co https://orcid.org/0000-0002-1581-327X
Introducción
Una de las metodologías de pedagogía activa que viene ganando interés
entre los académicos es el estudio de caso, el cual ha demostrado ser una
herramienta educativa que permite contrastar la práctica con la teoría, permitiendo
una mejor comprensión de los conceptos y el abordaje de aspectos complejos en
ciencias empresariales (Yin, 2013); también ha sido una metodología valiosa que
ha permitido investigar aspectos que habían permanecido de manera tácita como
lo ocurrido en múltiples organizaciones y que mediante el desarrollo de un
proceso de sistematización e incorporación del método científico ha
posibilitado que ese conocimiento hoy en día sea explicito (Castro Monge,
2010).
Una de las razones de su éxito en el mundo académico es la posibilidad
de integrar conceptos para la solución a problemas de situaciones reales o
simuladas en un contexto de aprendizaje experiencial, en vez de continuar con
los modelos tradicionales educativos que buscan tener un conocimiento parcelado
, pero que en ocasiones son difíciles de integrar y comunicarse entre sí,
dejando a los estudiantes con la duda de cómo se aplica una u otra asignatura o
conocimiento específico en el mundo real (Ridder, 2017).
Son varios los investigadores que en el campo de las ciencias
empresariales han documentado los beneficios sobre una correcta enseñanza a
partir de estudios de caso en la formación de competencias y habilidades
directivas (Culpin y Scott, 2012; Shivakumar, 2012; Sridevi, 2012); pues se
convierte en laboratorio dinámico de aprendizaje donde el experimento, si es
conducido de forma adecuada, puede no solo mejorar las habilidades directivas
de los sujetos, sino garantizar un aprendizaje correcto, lo cual es posible si
se traza una ruta pedagógica desde la programación de los cursos del plan de
carrera y se verifica en colectivos docentes el alcance de los mismos (Keevy,
2016; Mahdi, Nassar, y Almuslamani, 2020).
Una de las críticas – injustas, por cierto - que se hacen al estudio de
caso, es que muchos deben de ser comprarlos a ciertas universidades a precios
elevados; lo que dificulta el acceso a facultades de negocios con menos
capacidades económicas como lo son usualmente las instituciones universitarias
en países emergentes. Lo cual generaría inequidad ya que el conocimiento
estaría disponible al que pueda solventarlo económicamente.
De otro lado, al abordar el caso de estudio es importante no limitarse
al contexto de las preguntas que usualmente están al final de los documentos y
que en ocasiones podrían rayar dentro del campo de la subjetividad, por el
hecho de quien conduce el caso puede desconocer parcial o totalmente hechos o
la solución del mismo (Diefenbach, 2009; Shugan, 2006). Para superar esta
brecha, es importante la existencia de materiales complementarios y notas de
enseñanza, para que se pueda contar con el soporte adecuado, y, asimismo,
preparar los elementos necesarios para abordar la praxis con un nivel adecuado
de profundidad. Todo esto, con miras a conservar el rigor científico y, al
mismo tiempo, salvaguardar la conquista de aprendizajes significativos.
Otro reto que tiene la metodología son los ataque que se reciben por
parte de escépticos que argumentan el hecho de que, en ocasiones, los
profesores escogen algún material en particular, se hace la discusión y la
solución, y en este preciso momento, el estudiante puede salir con la falsa
sensación que aprendió (Shugan, 2006); situación que plantea la necesidad de
dar garantías de aprendizaje y evidencias que bien se podrían apreciar a través
de rúbricas.
También, existen diferentes tipologías de estudios de caso que nos
llevan comprender de que existe un método único para hacer investigación, ya
que el objeto, el contexto y la intencionalidad puede hacer que se acuda a una
técnica en específico o a una combinación de las mismas. Asimismo, y en esta
diversidad, tampoco existe una forma única de enseñar y mucho menos de evaluar
(Rave y Franco, 2011).
En este contexto, la presente investigación pretende compilar el
desarrollo alcanzado en torno a esta metodología y desde la diversidad de
enfoques con respecto escribir, enseñar y evaluar; con el propósito de superar
la perspectiva fragmentada que por general caracteriza a este campo. También,
merece mencionarse que estos despliegues investigativos se sustentan en los
hallazgos previos y reflexiones gestadas en el seno de la Red Internacional de
Investigación en Gestión del Conocimiento Empresarial (RED GCE).
Metodología
El presente trabajo se enmarca en un proceso cualitativo de análisis
documental (Barbosa, Barbosa, y Rodríguez, 2013) y el desarrollo de matrices categoriales (Corbetta, Fraile, y
Fraile, 2007) con el propósito de identificar pautas relacionadas en la
literatura de estudios de caso. Esto, con focos de atención referidos a las
pautas requeridas para escribir un estudio de caso, a la manera de enseñar bajo
esta metodología y al cómo evaluar formativamente – con el soporte de rúbricas
– las soluciones planteadas por los estudiantes en la sala de clases (Arias, Garcés,
Betancourt, Sepúlveda, y Arboleda, 2020).
Para desarrollar lo anterior; se diseñó una ecuación de búsqueda (ver
ecuación 1), según los parámetros de exploración propuestos por Codina, (2017),
utilizando además operadores booleanos para refinar los criterios de búsqueda
(Ll. Codina, 2018; Gallardo, 2013).
F(x)= (“Case study”
AND (write AND teach OR evaluate))
La anterior expresión arrojó un resultado amplio de 133 documentos en
bases de datos de reconocida trayectoria como Scopus, Web of Sciences (WoS) y
Google académico, los cuales se revisaron de forma sistemática en cuanto al
título y resumen para generar la coincidencias de búsqueda requerida, lo cual
se sumó a libros de reconocidos autores en el área para generar una base de 383
documentos gestionados con el Software Mendeley (Codina y Morales, 2019), con
los cuales se construyó el presente documento.
Resultados
y discusión
La revisión documental muestra un gran interés por la temática de
estudio de caso, encontrándose alrededor de 3,9 millones de documentos (ver
figura 1), los cuales abordan la metodología desde diferentes perspectivas
tales como la comprensión de teorías, la interacción de saberes fragmentados a
nivel académico, el análisis de procesos de cambio, estudios organizacionales,
aspectos culturales y laborales, revisión de fenómenos propios de la empresa.
Por otro lado, existe otro enfoque centrado en la metodología y su efectividad,
sobre el cómo mejorar los procesos investigativos, hacer comparaciones de
resultados y conceptuales, así como el motivar la interacción de docentes con
estudiantes para mejorar el desempeño, entrenar a los nuevos profesionales y
permitir el desarrollo de habilidades y competencias directivas en los sujetos
(Culpin, Eichenberg, Hayward, y Abraham, 2014; Keevy, 2016).
Figura 1. Evolución de publicaciones en
estudios de caso (2000-2020)
Fuente: Scopus
Existen autores que han propuesto diversos métodos y formas para la
construcción de estudios de caso de enseñanza, siendo el modelo Harvard el de
mayor acogida por los cuerpos académicos a nivel internacional; donde
frecuentemente se ilustran las prácticas y las estrategias que han llevado a
las organizaciones a obtener el éxito empresarial. Sin embargo, existen
críticas puesto que las universidades consideradas de elite, tienden a
centrarse en las grandes empresas, descuidando en ocasiones las realidades
locales en las cuales están inmersas muchas de las economías emergentes y dónde
la representatividad de las PYMES puede llegar a constituir el 90% o más del
tejido empresarial.
Recomendaciones de como investigar y
escribir un caso de enseñanza
Existen diversos autores que han propuesto rutas y pautas para
investigar basados en la metodología de estudios de caso, promovido por autores
como Robert Stake (Stake, 1995, 2004) y Robert Yin (Yin, 2012, 2013), a los
cuales se han sumado otros estudiosos del tema que han generado importantes
(Arias et al., 2020; Boblin, Ireland, Kirkpatrick, y Robertson, 2013; Camacho
Gómez, 2011; Culpin et al., 2014; Dooley, 2002; Flyvbjerg et al., 2006;
Martínez Carazo, 2006; Morgan, Pullon, Macdonald, McKinlay, y Gray, 2016; Rave y
Franco, 2011; Yacuzzi, 2005).
Al realizar la revisión documental, se pueden establecer un conjunto de
22 etapas que se deben surtir para llevar un adecuado proceso investigativo
(ver Tabla 1).
Tabla 1 |
|
N° |
Elementos |
1 |
Estar interesado, conocer y/o estudiar el sector sobre el cual se
pretende escribir el caso |
2 |
Seleccionar una lista de posibles empresas y seleccionar la más viable
según los criterios de investigación |
3 |
Analizar el contexto de la empresa |
4 |
Seleccionar el tema central del caso |
5 |
Formular el problema de investigación |
6 |
Proponer la hipótesis o el conjunto de ellas |
7 |
Revisar si existen temas que se conectan con el foco del caso |
8 |
Explicar a la empresa que se pretende con el caso y que insumos se
requieren para construirlo |
9 |
Definir a la empresa que garantías tiene y que ganara con la
realización del caso (reputación, reconocimiento, marketing académico, posicionamiento,
etc. |
10 |
Solicitar permisos y accesos a la información |
11 |
Establecer con la empresa asuntos de confidencialidad de información.
|
12 |
Determinar qué se puede incluir en el caso, qué se autoriza y qué no
(para que el investigador defina si es pertinente o no continuar el ejercicio
investigativo) |
13 |
Realizar un cronograma de actividades |
14 |
Definir los recursos necesarios (dinero, personal, etc.) |
15 |
Realizar trabajo de campo |
16 |
Recopilar información utilizando fuentes primarias y secundarias |
17 |
Procesar la información cualitativa y cuantitativa |
18 |
Triangular la información |
19 |
Articular con la literatura académica |
20 |
Redactar el caso y las preguntas orientadoras |
21 |
Desarrollar materiales complementarios y/o sugerirlo |
22 |
Realizar la nota de enseñanza y/o la guía de clase |
Fuente: (Arias et al., 2020). |
Después del desarrollo investigativo propuesto en la Tabla 1, viene una
de las etapas más importantes que es la escritura del material académico; el
cual puede ser escrito con la estructura propia de un artículo científico,
capítulo de libro o incluso libro (Eisenhardt, 1991; George, 2019; Siggelkow,
2007; Welch, Piekkari, Plakoyiannaki, y Paavilainen-Mäntymäki, 2011; Yin,
2013). Incluso, hay quienes documentan sus hallazgos con una narrativa propia y
desde una perspectiva literaria, creando historias y cuentos a partir de sus
hallazgos (Camacho Gómez, 2011; Ogliastri, 1998).
En la redacción del caso, es recomendable adoptar una estructura simple
para que sea entendible por el público de pregrado y posgrado sin dejar de lado
el rigor y la solvencia teórica. Así, y en virtud a esto, el autor debe buscar
una construcción efectiva, procurando la existencia de elementos propios que interactúen
con otras áreas del conocimiento a nivel disciplinar y transdisciplinar
(Crosbie, 2005; Harland, 2014; Sridevi, 2012).
La estructura propuesta para la construcción de un caso de estudio (ver
tabla 2), presenta la estructura propia que debería tener un caso de enseñanza:
Tabla 2 |
|
N° |
Elementos |
1 |
Resumen |
2 |
Temas que cubre el caso |
3 |
Introducción |
4 |
Pregunta de investigación |
5 |
Metodología |
6 |
Reseña histórica y/o marco teórico |
7 |
Desarrollo del foco y/o temática |
8 |
Análisis sectorial |
9 |
Prospectiva y/o proyección |
10 |
Conclusiones |
11 |
Preguntas para el análisis |
12 |
Lecturas complementarias sugeridas (textos, páginas web) |
13 |
Bibliografía |
14 |
Nota de enseñanza |
15 |
Material complementario y anexos |
Fuente: (Arias et al., 2020). |
La nota de enseñanza es un material pedagógico dirigido especialmente al
docente que va a llevar la sesión de estudio; el cual debe garantizar unos
estándares mínimos de calidad en cuanto al aprendizaje (Naumes y Naumes, 2015)
y la ética sobre lo que se aprende (Rendtorff, 2015). Del mismo modo, se debe
procurar que el proceso de enseñanza sea el adecuado y, por consiguiente, que
los estudiantes estén aprendiendo correctamente (Wai y Seng, 2013).
Una de las características que favorecería el aprendizaje en las
circunstancias en las que se dio el desarrollo del estudio de caso, es la nota
de enseñanza, la cual se constituye como un material pedagógico orientador para
guiar una solución de manera adecuada las cuales podrían tener los siguientes
elementos sugeridos (ver Tabla 3).
Tabla 3 |
|
N° |
Elementos |
1 |
Tipo de público para ser aplicado |
2 |
Localización geográfica y temporal de la empresa y el caso |
3 |
Clasificación del caso (Extrínseco, intrínseco, exploratorio,
descriptivo, ilustrativo, explicativo, etc.) |
4 |
Síntesis del caso |
5 |
Temas que cubre el caso |
6 |
Habilidades y/o competencias a desarrollar |
7 |
Aprendizajes previos que debiesen tener los estudiantes |
8 |
Materiales complementarios |
9 |
Recomendaciones a los docentes sobre aprendizajes transversales y
complementarios con otras disciplinas |
10 |
Entregables por parte de los estudiantes |
11 |
Estrategias para mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje |
12 |
Experiencias previas en la utilización y aplicación de los estudios de
caso |
13 |
Relatar que ocurrió realmente |
14 |
Rubricas de evaluación del caso |
Fuente: (Arias et al., 2020). |
Recomendaciones sobre cómo enseñar a
partir de estudios de caso
No existe una manera única de enseñar con estudios de caso ya que cada
docente que enseñan imprime sus propios estilos o formas didácticas. Sin
embargo, es importante seguir unas pautas que permitan, a partir de las
diferencias, cristalizar despliegues académicos articulados armónicamente para
que se cumplan los propósitos formativos del estudio de caso. El propósito es
buscar una interacción entre el sujeto, el equipo, el contexto, la teoría y la
práctica que conduciría más que a una solución propiamente en sí a un
aprendizaje significativo, formativo y experiencial.
Existen técnicas que va desde el desarrollo tradicional del estudio de
casos donde el maestro entrega el material para ser leído y responder unas
preguntas orientadoras en un contexto de clase. Otros hacen uso de
representaciones teatrales y escenarios simulados. Asimismo, un grupo
importante de educadores recurren a medios audiovisuales u optan por
desarrollar casos en vivo directamente en los escenarios donde ocurren los hechos,
usualmente con personajes de la vida real tales como gerentes y personal clave;
hasta el uso de material interactivo que contempla cursos de acción diferentes
dependiendo de las elecciones que van dando los sujetos al desarrollo propio
del caso.
De esta manera, e independiente de la estrategia utilizada, existe
evidencia empírica de la interacción de los estudiantes con el método de caso
en el cual la teoría cobra sentido, motiva la creatividad y el deseo por
conocer aspectos por cuenta propia a través de la indagación complementaria.
La preparación del curso debe integrar la teoría y los casos
seleccionados por el docente deben armonizar con los propósitos formativos para
que estos no se vean sueltos y lleven al estudiante en una secuencia lógica de
aprendizaje (Tecnológico de Monterrey, 2010); sin embargo, es esencial que los
ejercicios de casuística no sean esfuerzos aislados por parte de los docentes
que quieren preparar mejor a sus estudiantes. Por el contrario, debe ser un
esfuerzo coordinado por parte del programa, la facultad e incluso la
institución educativa para que se puedan lograr los fines deseados.
La preparación de casos a medida para articular el avance teórico del
curso que se lleva o la integración de asignaturas (si el desarrollo educativo
se da de esta forma) requiere una adecuada preparación del personal docente con
la metodología, la investigación, el desarrollo de la escritura y la aplicación
en clase de los casos de estudio. Por ello, se deben tener en cuenta las
siguientes recomendaciones (ver Tabla 4).
Tabla 4 |
|
N° |
Elementos |
1 |
Preparar el sylabus o también denominado micro currículo en el cual se
exprese el tipo de casos, número y sesiones de trabajo dentro del marco de la
asignatura |
2 |
Revisar el número, calidad y objetivos de los casos seleccionados |
3 |
Analizar que conceptos teóricos que se relacionan con los diferentes
momentos del curso y con los casos planteados |
4 |
Definir la estrategia evaluativa |
5 |
Inducir al estudiante en que consiste la metodología y que se espera
de su trabajo y aportes tanto a nivel individual como de equipo |
6 |
Asegurarse de solicitar los entregables y preparaciones previas a los
estudiantes para asumir la metodología |
7 |
Hacer un seguimiento minucioso del desarrollo del caso y los objetivos
de aprendizaje en las diferentes sesiones donde se trabaje |
8 |
Propiciar el trabajo colaborativo y la discusión grupal argumentada |
9 |
Detonar discusiones problémicas mediante preguntas orientadoras a los estudiantes |
10 |
Relacionar conocimientos de otras áreas y motivar la indagación a
profundidad por parte del estudiante |
11 |
Propiciar la creatividad y la innovación |
12 |
Evaluar de manera grupal las posibles decisiones y las implicaciones
de las soluciones generadas en clase |
13 |
Incorporar en la evaluación otros colegas para que puedan realizar
aportes significativos desde diferentes áreas del conocimiento |
14 |
Realizar retroalimentación |
Fuente: (Arias et al., 2020). |
Respecto a la ruta de aprendizaje, el profesor Enrique Ogliastri propuso
el siguiente esquema en el cual se debe preparar el caso abordando los hechos y
en donde posteriormente debe generar un análisis minucioso apoyándose en la
teoría, prácticas y experiencias propias del docente y los estudiantes. Esto,
con el fin de contemplar todos los hechos posibles, focalizarse en el problema
y comprenderlo en profundidad para establecer posibles salidas, soluciones o
abanico de decisiones pertinentes al caso debidamente contextualizado (ver
figura 2):
Figura 2. Proceso de
enseñanza a partir del método de estudio de caso
Fuente: Tomado de Ogliastri (1998, p.
16).
Recomendaciones de evaluación estudios
de caso: la rúbrica de evaluación
Uno de los aspectos que aporta claridad al proceso de
enseñanza-aprendizaje es el desarrollo de una rúbrica de evaluación por parte
del docente o el autor del caso; sugiriendo un enfoque orientado hacia temas
específicos que deben complementarse con la discusión académica entre pares y
con la participación activa por parte de los responsables del curso.
Frente a lo anterior, Gordillo y Rodríguez (2010), mencionan que:
La rúbrica es un instrumento de evaluación basado en una escala
cuantitativa y/o cualitativa asociada a unos criterios preestablecidos que
miden las acciones del alumnado sobre los aspectos de la tarea o actividad que
serán evaluados. Básicamente, existen dos grupos: las holísticas, que tratan de
evaluar el aprendizaje o competencia desde una visión más global, y las
analíticas, que se centran en algún área concreta de aprendizaje. Además, nos
permite diseñarla para tareas amplias o específica (p.142).
Por lo tanto, el desarrollo de una rúbrica para estudios de caso, debe
ser consecuencia del proceso de estructuración del conocimiento que permitió su
escritura y el cual debe contar con elementos mínimos (ver Tabla 5), para
evaluar el aprendizaje a nivel individual o colectivo de una forma integral
(Chan, Inoue, y Taylor, 2015; Clary, Brzuszek, y Fulford, 2011; Llanes y
Massot, 2013; Maggin, Briesch, Chafouleas, Ferguson, y Clark, 2014; Noblitt,
Vance, y Smith, 2010; Riddle, Smith, y Frankforter, 2016).
Tabla 5
Propuesta de rúbrica para evaluar la
solución de los casos de enseñanza
Perspectiva |
Ítem |
Criterio |
Excelente |
Bueno |
Regular |
Deficiente |
Insuficiente |
Perspectiva de la Solución del caso |
Presentación
del caso |
Coherente
y adecuadamente documentado |
|
|
|
|
|
Lectura
detenida |
Se realiza una adecuada compresión de lectura y del
contexto |
|
|
|
|
|
|
Identificación de lo que se pide |
El o los estudiantes comprenden el alcance de las
preguntas orientadoras del caso y/o el docente? |
|
|
|
|
|
|
El
caso tiene solución |
Pasar a las etapas de resolución |
|
|
|
|
|
|
El caso no tiene solución |
Argumentar desde una posición teórica porque no se
puede llegar a una solución |
|
|
|
|
|
|
Extras |
¡Él o los estudiantes entregan elementos
adicionales, perspectivas no contempladas o aspectos poco evidentes del caso
abordado? |
|
|
|
|
|
|
Tiempos de resolución del caso |
El o los estudiantes entregaron a tiempo |
|
|
|
|
|
|
Perspectiva del docente y/o equipo académico de evaluación |
Análisis de alternativas diferentes a las soluciones
tradicionales |
¿El o los estudiantes proponen alternativas
diferentes, creativas y posibles al desafío planteado? |
|
|
|
|
|
Competencias y/o habilidades evidenciadas por el
docente |
Competencia (s) y/o habilidad (es) que el docente
pretenda medir |
|
|
|
|
|
|
Argumentación |
El o los estudiantes argumentan adecuadamente los
conceptos o soluciones que proponen |
|
|
|
|
|
|
Uso
de teorías |
¿Los estudiantes argumentan desde posiciones
teóricas la solución o posibles soluciones del caso? |
|
|
|
|
|
|
Perspectiva
del estudiante |
Autoevaluación por parte del estudiante |
Participación |
|
|
|
|
|
Responsabilidad |
|
|
|
|
|
||
Dinámica
de trabajo |
|
|
|
|
|
||
Actitud
de trabajo |
|
|
|
|
|
||
Trabajo
en equipo |
|
|
|
|
|
||
Responsabilidad |
|
|
|
|
|
||
Perspectiva del equipo de trabajo |
Evaluación del equipo de trabajo a cada uno de sus miembros |
Dinámica
de trabajo |
|
|
|
|
|
Actitud
de trabajo |
|
|
|
|
|
||
Trabajo
en equipo |
|
|
|
|
|
||
Responsabilidad |
|
|
|
|
|
Si bien lo anterior es una propuesta de rubrica, cada maestro puede
incorporar elementos no contemplados aquí con el propósito de mejorar los
instrumentos de evaluación del desempeño estudiantil. Además, esta rúbrica
permitiría identificar tanto fortalezas como debilidades con miras a la mejora
constante.
Conclusiones
Este trabajo reúne una serie de pautas distribuidas en la literatura de
estudios de caso y ha procurado abordar en un solo documento algunos criterios
que deben ser tenidos en cuenta para investigar, escribir, enseñar y evaluar.
Asimismo, es importante anotar que los estudios de caso es un área que está en
una constante dinámica de cambio, y por ello, es importante continuar
actualizando los elementos que acompañan el proceso de enseñanza aprendizaje en
función de los cambios tecnológicos y los hallazgos alrededor del mundo en este
campo de conocimiento.
Referencias
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